Pero bueno, después haré una crónica de mis últimos viajes que la verdad me han enseñado mucho y han ampliado mis ganas de salir corriendo de aquí. Lo importante de este post es hacer mención de cómo nosotros mismos nos complicamos en ocasiones la vida y no dejamos que nuestros sueños tomen forma porque estamos preocupados por un sinfín de cosas. Esto nace de una experiencia que tuvimos en un bote que te pasea por todo el corredor hasta el parque fundidora, -el cual está surrealista por no decir más de él-; pero bueno lo chistoso o lo que hace que yo me siente aquí a escribir y despejarme un poco de todo el rollo que traigo del trabajo es el conductor del botecito en que nos subimos.
El tipo era mega cómico y a pesar de tener un trabajo como el que yo desempeñé por varios años en un Museo, que era dar la misma explicación una y otra vez, hizo que esa media hora sumamente agradable, hizo muchas bromas sobre la economía de los Regios y de cada cosa que veíamos al pasar. En cambio el regreso fue el recorrido más largo que me ha tocado vivir y sobre todo escueto. Ahora la moraleja de la historia es lo siguiente: Puedes tener el trabajo más aburrido, repetitivo, tedioso y monótono, tratar con la gente más apática, estúpida e irracional; pero todo el secreto está en tí, hacer la diferencia con una actitud positiva puede que disfrute un poco más y que tu día esté mejor de lo que podría si andas todo ofuscado y molesto. Claro en teoría suena muy padre y parece ser sencillo, pero hay cosas difíciles y a eso se le cocina aparte.
Hoy vi fotos de una chica en Facebook y descubrí que no lo había analizado sino hasta ahorita, y es importante tenerlo en mente cuando te hacen quedarte horas extras, te piden que hagas varias cosas para ayer, o bien, quieren que resuelvas un problema que parece no tener ni pies ni cabeza. Es por eso que trataré de tomarlo más en cuenta y a pesar de estar crudito en la oficina un domingo ya casi por la tarde, pensaré positivamente que en algún momento darán las cinco y me podré ir :D.
2 comentarios:
yo tampoco conozco mty, se me antoja bastante.
Pues deberías en cuanto puedas darte una escapadita poque de verdad vale la pena, la ciudad es hermosa y tiene muchas cosas por ver. Te soy sincero estuvimos día y medio nada más y conocimos solo el paseo Santa Lucía y sus alrededores; pero estuvo muy padre.
Así que date a la tarea y fuga para allá.
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