Gracias a la fortuna, a partir de este día 9 de julio tendré mis dos semanas de vacaciones, que a decir verdad, no se si las merezca, pero de que las necesitaba, es un hecho que si. Se queda en mí cierta ansiedad o más bien el cuerpo guarda memoria de tantos días de despetarse temprano, correr al baño, mal escoger la ropa, tener que rasurarse y ponerse decente para asistir a mi lugar de trabajo. Debido a múltiples razones, muchas de ellas emocionales, es que había caído un poco en descuido en el trabajo, ya que la verdad mi caracter ha cambiado un poco, en cualquier contexto que se quiera ver; como que he dejado de ser el niño super buena onda que no responde a las provocaciones, pero realmente el ser así, bocón o respondón, no me hace ser más feliz, ni hace que yo sea más productivo ni mucho más eficiente. Creo que la verdad como estaba antes estaba mucho mejor, y la verdad es que esta pausa en el continuo transcurrir del tiempo me sentará de maravilla, a leer, a escribir, a terminar la tesis y mejor áún a descansar, a pachangear el fin, y porque no, a hacer ejercicio cuando se pueda, porque los años hacen que la panza vaya para abajo, cada vez más para abajo, un día me llegará a las rodillas si no me propogo cuidarme, y no solo por estética sino por salud.
Otra de las tantas cosas, es que quiero hacer cosas por mi casa, pintar lo que ya se va medio viejón, dar vueltas que comúnmente no doy, hacer mandados, aunque con este calorcito tan sabroso, pues si está medio canijo, pero en fin. Sobre todo me interesa crear bocetos de los planes que quiero ejecutar llegando a mi trabajo, porque si uno hace una cosa mal, que caso tiene sentirse mal sin hacer algo al respecto, por eso mismo debo ser aún más y más productivo y no dejar que nada decaiga mi ánimo, y es que muchas ocasiones uno tiene mil intenciones buenas, y el pesimismo o las circunstancias nos las quitan, pero ahí es donde debemos perseverar y continuar haciendo el intento. No entiendo en realidad porque será que la naturaleza del ser humano es así, luchamos frenéticamente por conseguir aquello que anhelamos, podríamos morir en el intento; pero una vez que ya lo tenemos, nos descuidamos, le perdemos el interés y aquello que era nuestro ideal queda en segundo, tercer o último término. Me ha pasado con juguetes, guitarras, amores, trabajo, lugares y demás, y no se si a los demás les pase así como a mi, pero es que a veces siento que me pasa a mi más que a nadie, y no sé como que todo lo que llega lo trato de exprimir rápidamente y luego pues como que se torna rutinario, y no niego que cada día me recrimino y soy el más severo juez conmigo mismo, a veces tanto que me censuro en cada cosa que digo, pienso o hago. Lo que si sé, es que quiero hace rendir al máximo mis vacaciones, y se que no pensar en nada del trabajo será lo más bueno.
Por otra parte el primo Pepe amenaza con venir, así que la fiesta se pondrá de categoría, a ver a donde nos podemos ir a vagear. ¡oh, Benditas Vacaciones!, lo único que coronaría estas vacaciones sería una conquista de verano, yo y mis tarugadas. jajajajajajjaa. PEACE & LOVE
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