

Pero bueno, musicalmente soy más viejo que muchos adultos, -Al menos eso considero yo-, sin embargo, lo importante de este post, es hablar un poco sobre una banda que desde hace tiempo había oído hablar, incluso había bajado su disco y había escuchado fugazmente, hasta que un día hicieron click con mi estado emocional y una vez que yo había bajado la guardia ellos entraron totalmente en mi gusto sónico.

Mi encuentro con ellos, fue ocasional pues tengo al costumbre de comprar ocasionalmente revistas de novedades musicales, - generalmente independiente -, pues gran parte de la maquinaria comercial ha sepultado para siempre la buena música. Debo confesar que muestro un gran escepticismo en cuanto nuevas bandas, y sobre todo a escuchar "nuevas propuestas", y ocasionalmente me porto como el común de la población, bajo mil y un cosas y postergo la escucha de los mismos. Eventualmente, una u otra cosa me lleva a darle un tiempo y oportunidad a cada nueva banda, creando entonces un filtro de las cosas que considero valen la pena escuchar y las que no son para nada rescatables.
MGMT, es una de las bandas emergentes que ha demostrado tener una propuesta firme y concreta, un poco alejados de esas buenas bandas nuevas de guitarra, como the kooks, fratellis, arctic monkeys entre otros, ellos reciben demasiada influencia de la psicodelia de finales de los 60's; incluso noto un poco de Barrett en el vocalista, me recuerda a quien por aquellas épocas fuera el líder de Pink Floyd, con una imagen totalmente extravagante, de colores exitantes y vestuarios hippiescos.
Sónicamente considero una labor un poco dificultosa describirlos, encuentro desde reminiscencias de Jefferson Airplane, hasta sonidos peculiares y melodías contagiosas a varias voces como lo que fue en ese entonces Pipes of the Gates of Dwan de los floyds, el uso de sintetizadores y exploración de sonidos, los hace tener una personalidad propia, aclaro, esa inclusión de sonidos cósmicos, no es nada improvisada, es una fórmula que pocos grupos alcanzan, y si encima de eso el suman que la construcción armónica de cada tonada es agradable en sumo grado, encontramos que MGMT encontró la manera perfecta de conjuntar todo lo necesario para que una banda logré crear conmoción hoy en día.
Lo que más me sorprende es que mediante su peculiar sonido y estética se han logrado colocar en los primeros lugares de rotación en las estaciones de radio, ý ¡vaya que escucharlos en una estación popera es un logro para un grupo indie! Del disco personalmente recomiendo obvio Time to pretend, the youth, electric feel, kids y the handshake. Espaciales y cósmicos, primos hermanos lejanos de los floyd de la psicodelia de los 60's una banda sumamente recomendable.
Después del comercial, es justo ahí en donde me encuentro en un predicamento, constantemente disfruto de escuchar cosas que son poco comúnes y que alteran un poco los nervios de las personas que solo escuchan a Luismi, Belanova o cualqueir otra porquería. En el caso ,de MGMT, que son una banda muy cool, y con propuesta, me pasa algo un poco raro, en el sentido de que cuando una banda muy buena empieza a ser escuchada por la mayoría, yo inmendiamente como un acto reflejo tiendo a alejarme de esos gusto, ¿Por qué?, simplemente por el hecho de que, cuando la demás gente hace de algo original y especial, una moda, empiezo a desconfiar de ellos y de la banda en sí, y es aquí donde retoma un poco de sentido lo que se menciona un poco más arriba, me alejo de la colectividad, tengo una increíble necesidad de no masificarme, de no caer en ese consumismo, de no transpolar nuestra insaciable necesidad comercial a algo tan bello como es la música. Admito que desde hace algunos meses no bajo ningún disco, porque la última tanda fue bastante interesante.
No puedo negar que por otra parte, el increíble cúmulo de bandas nuevas me genera inquietud, y es que, aunque lo intentado, el consumismo nos llega a todos por nuestro lado más débil, de momento estoy contento con lo que escucho, pero tengo nuevas bandas de las cuales, no sé si me gustaría escuchar, considero oir música, o mejor dicho ¡tragársela!, como un compromiso serio que hoy en día, nadie lo afronta como tal. Es como enamorarse, es tan especial como un transtorno o una posesión al modo del largometraje El Exorcismo. Cuando la música se vuelve un vicio y una necesidad, es cuando, hermanos míos, estamos pérdidos. Agradezco a muchos de mis amigos que tuvieron paciencia cuando y no salía de mis gustos oldies, y me presentaron nuevas propuestas, sin las cuales, yo no sería la misma persona.