Hace algún tiempo, tenía como alguno de mis objetivos principales estar en un trabajo que me pagara viajes a distintos puntos del país para aprender con ello lo que estaban haciendo los otros museos y no llegó. Después llegó un ciclo de cambios y a pesar de que no dejó nada positivo en sí, la experiencia de una transición política siempre es interesante. En el trabajo que estoy últimamente se ha dado aquello que por tanto tiempo deseé, y me siento sumamente feliz por ello.
Hoy estuvimos en una de las partes más bellas de la ciudad de México, por las calles que anduviera la querida Frida y Diego, Coyoacán; conociendo construcciones preciosas, gente y estilos de vida un poco distinto al nuestro. Pero lo que en realidad me deja la impresión de escribir, es la oportunidad de estar en una situación masiva como fue presenciar el partido de México - Argentina en pleno zócalo de la ciudad de México, ser parte de esa colectividad que por su país gritaba, insultaba y hasta se desilusionó con el desfavorable marcador. Gracias al destino y a mi Dios por estas oportunidades.
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